Iris sibirica

Planta pernne provista de un bulbo ovoide que perdura durante el invierno y esta cubierto de las hojas de los años anteriores. Crece en prados y herbazales húmedos, arcillosos o algo calcáreos pudiendo alcanzar unos 70cm de altura. Florecen durante toda la primavera e inicios del verano y se emplean en taludes, para formar orlas y bancales y para crear notas de color en el césped. Son apropiadas también para jardineras. Aunque prefieren una exposición de pleno sol pueden vivir también en semisombra. Resisten el frío y las heladas. Tienen preferencia por los suelos calcáreos pero pueden prosperar en cualquier suelo que esté bien drenado y mejor si contiene materia orgánica que lo haga más fértil. Los rizomas se plantan a finales del verano. Regar de forma moderada ya que tienen tendencia a pudrirse con el exceso de agua.